En la construcción moderna, la economía circular ya no es una tendencia, sino un pilar de innovación y sostenibilidad. En ciudades como Cali y Palmira, donde el sector constructor impulsa gran parte del desarrollo regional, pensar en cómo gestionamos los residuos puede marcar la diferencia entre un proyecto costoso y uno eficiente, rentable y responsable con el entorno.
¿Qué significa economía circular en la construcción?
La economía circular busca cerrar el ciclo de los materiales, es decir, que lo que antes se consideraba “desecho” se convierta en un recurso útil para nuevos proyectos. Esto implica:
- Reutilizar materiales de demolición.
- Reciclar insumos como plásticos, metales y concreto.
- Implementar tecnologías que reduzcan el desperdicio.
- Apostar por productos ecoamigables y duraderos como recubrimientos sostenibles.
Datos que reflejan la urgencia
🔎 Según la ONU, la construcción genera cerca del 40% de los residuos sólidos del mundo.
🔎 En Colombia, gran parte de los escombros termina en rellenos sanitarios, perdiendo oportunidades de reaprovechamiento.
En el Valle del Cauca, integrar la economía circular no solo ayuda al ambiente, sino que optimiza los costos y la productividad de cada obra.
Beneficios de aplicar economía circular en proyectos locales
✅ Ahorro económico: materiales recuperados reducen la necesidad de nuevas compras.
✅ Menor impacto ambiental: se disminuye la presión sobre rellenos sanitarios y recursos naturales.
✅ Innovación en diseño: nuevos materiales reciclados permiten crear espacios únicos y sostenibles.
✅ Cumplimiento normativo: alineación con estándares de sostenibilidad exigidos en licitaciones y proyectos empresariales.
El rol de los recubrimientos sostenibles
Los recubrimientos de alta durabilidad y bajo VOC, como los desarrollados por Monarca en Palmira, son parte esencial de esta transformación. Al extender la vida útil de muros y superficies, reducen la frecuencia de remodelaciones y con ello, el consumo de recursos.
Conclusión
La economía circular en la construcción no es solo un discurso, es una forma práctica de transformar residuos en recursos, mejorar la productividad y garantizar espacios más responsables.
En Monarca, creemos que cada elección —desde un estuco hasta una pintura ecoamigable— puede ser el primer paso hacia un futuro más sostenible en Cali, Palmira y todo el Valle del Cauca.